Tanto los deportistas profesionales como los aficionados al deporte debemos enfrentarnos con, desgraciadamente, relativa frecuencia a un enemigo muy, pero que muy molesto: las lesiones.

Todos los deportes tienen sus lesiones características y el Running no iba a ser una excepción, más aún si tenemos en cuenta que se trata de un deporte de alto impacto donde, las articulaciones de la parte inferior del cuerpo deben soportar y absorber todos los microtraumatismos y la sobrecarga, que provoca el choque de los pies contra el suelo en cada zancada de la carrera.

Entre las lesiones más típicas del corredor se encuentran:


lesiones-típicas-del-corredor
Lesiones típicas del corredor
-       Agujetas: Aunque no debe ser considerada como una lesión en sí misma no debemos dejar de mencionarlas, ya que el dolor que producen, puede llegar a ser incapacitante. Se producen por micro lesiones de las fibras musculares causadas por un trabajo muscular por encima del nivel al que se está acostumbrado.

El tratamiento será realizar, en cuanto seamos capaces, ejercicio y beber mucho líquido para limpiar lo antes posible nuestros músculos de sustancias de desecho. En los casos más severos, puede tomarse algún analgésico suave, tipo  Paracetamol o Ibuprofeno.

-       Tendinitis: Es la inflamación de un tendón. Entre los corredores una de las tendinitis más frecuente es la del tendón de Aquiles, en la que aparece cojera e imposibilidad de ponerse de puntillas.



Las causas pueden deberse a no realizar un calentamiento adecuado, sobrecarga muscular, correr con zapatillas poco apropiadas  (con poca amortiguación). Se da más en corredores que tienden a la pronación.

El tratamiento se basa en reposo durante la fase aguda, antiinflamatorios y aplicación de frío local.

La mejor prevención es un calentamiento correcto y unas zapatillas con buena amortiguación y adaptadas al tipo de pisada (neutra, pronadora…)

-       Fascitis plantar: La fascia es una banda de tejido que va desde el talón hasta los dedos recorriendo toda la planta del pie. Su misión es amortiguar los impactos y estabilizar el talón.

Este tipo de lesión es más común entre corredores a partir de los 35 ó 40 años debido a que con la edad, la fascia comienza a perder parte de su elasticidad.

El tratamiento se basará en un calzado con una amortiguación adecuada. En ocasiones se necesitarán unas plantillas ortopédicas para aliviar los dolores y solucionar la inflamación.

lesiones-típicas-del-corredor
Corredor: lesiones típicas
Se puede correr con este problema siempre y cuando no sea muy severo y adaptemos nuestro ritmo de entrenamiento (acortar distancias, reducir intensidad, asegurarnos un buen calzado, correr por un terreno más blando…)

En casos más complicados el tratamiento será médico.

Otras lesiones frecuentes entre los corredores serían la “rodilla de corredor” y la bursitis de cadera.